Los sistemas de energía con el que se logra mantener un buen sistema de calefacción y agua caliente en entornos urbanos, no tienen por qué provenir de energía fósil. El uso de gas o de gasóleo hace que la contaminación y las emisiones de gas se disparen sin que, además, suponga una mejora a nivel de rendimiento. Existen otros métodos de hacer llegar energía a las casas de un modo sostenible, eficaz y con otras ventajas. La red de calor basada en energías renovables es una opción que representa a las claras lo que los tiempos actuales demandan: Eficiencia y limpieza.
¿Cómo se produce una red de calor?
Este modo de producción de energía alternativo y respetuoso con el medio ambiente se obtiene mediante el desarrollo de equipos de producción térmica con energías renovables. Estas energías limpias son, en mayor medida, la energía solar y la biomasa. A partir de ahí, se crean proyectos de calefacción urbana y agua caliente con los que dar cobertura a la población de un modo sofisticado y equitativo.
A partir de ahí, cabe destacar que la implantación de una red de calor trae consigo diversas ventajas. Por un lado, el ahorro en las facturas es palpable. Ya que con estos sistemas energéticos se consigue disminuir el gasto hasta en un 25%. Además, no se producirán cortes en el suministro, pudiendo disponer de estas prestaciones térmicas de un modo óptimo.
Todo ello, unido a que ya no deberás preocuparte por los gastos derivados del mantenimiento de caldera y a que tu hogar podrá revalorizarse mediante una certificación energética de clase A, hace que la red de calor urbana sea el método más ventajoso a nivel energético y medioambiental. Los sistemas de energías renovables han llegado para quedarse. El cambio hacia una correcta utilización de los recursos energéticos está en marcha. Y en DH Ecoenergías trabajaremos diariamente para conseguirlo.